Este es uno de esos itinerarios por los que no das un duro por su situación y, sin embargo, una vez realizado, quedas gratamente satisfecho por el entorno de contrastes del mismo, que acentuado por el agua que brota de los barrancos, lo convierte en un recorrido de diez en toda regla.
Gracias a una charrada con Irene y David nos enteramos de esta ruta, y poco nos lleva la reflexión de la conversación, puesto que en una semana dicho y hecho.
Cueva de la Mora |
Pasamos Caldearenas y, a la entrada de Aquilué hay una pista de unos dos kilómetros indicada como Ermita de la Virgen de los Rios, punto de partida a pie de nuestra ruta. Poco antes de curzar el barranco y antes también de llegar a la ermita, parte una senda a la izquierda en ascenso indicada como Cueva de la Mora y Pozo de nieve. La tomamos y ya no hay pérdida, puesto que la han limpiado aparentemente hace poco y es difícil perderse dada su anchura hasta el collado.
En este primer tramo nos desvíamos en un par de ocasiones a la derecha y en bajada para visitar la entrada de la Cueva la Mora, que nos sorprende con sus dos oscuras bocas, y un nevero en buen estado de conservación. Pero, sin duda alguna, lo que nos pierde los ojos son varias cascadas (algunas de ellas de una treintena de metros) que hoy van petadas de agua gracias a las últimas lluvias caídas, y que le dan al entorno una belleza especial, dado que a dicha belleza la acompaña el sonido relajante del resbalar de las aguas por las rocas.
Una vez en el collado, nos recibe en primer término el lajado Pico Peiró, a la izquierda el final de la Sierra de Bones, y a la derecha la senda que debemos seguir a lo largo de la loma, y que ahora ya se estrecha hasta llegar a la cima del Presín. Aunque la cima no es tan bonita como el collado antes pasado, en ella disfrutamos de unas amplias vistas del Pirineo que hoy, recien nevado, está maravilloso.
Y lo dicho, como nos ha gustado más el collado, ahí que vamos para comer y hacer el pertinente descanso que nuestro cuerpo ya empieza a necesitar.
Bajamos por el mismo camino de subida, completando así una muy buena ruta de cinco horas de diez kilómetros y casi 700 metros de desnivel. Pas mal...
Si queréis el track, aquí.
Barranco de los Burales. Subimos paralelos a él durante buena parte de la ruta |
Pico Peiró |
La cima no le gustó demasiado a Isuel |
Ermita de la Virgen de los Ríos |