Para llegar a este sitio, que recomendamos totalmente, hay que coger una carretera que está detrás del Monasterio de Boltaña y seguirla sin desviarnos en ningún cruce hasta llegar a un cartel indicativo de parking.
Aquí dejamos los coches y comenzamos a andar siguiendo 200 metros la carretera, y pasada una granja, cuando la carretera gira a la derecha, a la izquierda sale la senda que nos lleva hacia el río.
Nosotros escogemos remontar el río para llegar a la cabecera a través de una ferrata (como indican en la red), así realizamos tres actividades en una: senderismo, barranquismo y ferrata, pero también está la posibilidad de subir a la cabecera por senda, que está indicada por carteles.
Para salvar el segundo rápel, pasaremos por debajo de la cueva y la cascada y, en la izquierda, encontraremos unas cadenas con unas buenas raíces de árbol y un mini cable de vida (una sirgueta endeble que pa qué te voy a contar...) que nos situarán en la base del primer rápel, y siguiente obstáculo a superar.
Señores y señoras: estamos en "El coño del mundo", vaya piazo vaginón!!!, es muy evidente porqué llaman así a este lugar. Estos 27 metros los remontamos gracias a una senda que está a la izquierda de la caída de agua, y que sube directa entre maleza hasta un paredón de unos 10 metros verticales donde aparecen unas tensas cadenas con el mini cable de vida. Aviso: no hay grapas para pies, así que esto es sólo apto para brazos de Sansón. Madre mía qué manera de tirar!!!, esto ni es ferrata ni es ná, esto es una putada!!! Bueno...pues haciendo el animalico lo pasamos.
Por fin empieza el descenso, que llevamos un buen rato hasta aquí arriba... Bajamos los 27 metros dejando El coño del mundo a nuesta derecha, casi sin pisar agua. El segundo rápel, de 23 metros, desciende volando por una preciosa cueva.
Antes de llegar a la poza Chinchirigoi, encontramos a la izquierda nuestro segundo objetivo del día: el Barranco de Sieste. A la izquierda de su término, sale una senda que nos lleva en 10 minutos a la cabecera. Aquí los rápeles son de 17 metros (volado), una rampa de 28 metros, y otro de 5 metros (evitable), y para terminar, un salto obligado de unos tres metros (algo delicado).
Volvemos a estar de nuevo en el cauce del río Sieste, y como premio final, saltamos entre 5 y 6 metros o rapelamos a la bella poza de Chinchirigoi.
Primer rápel del barranco de Sieste |
Salto obligado de 3 m |
Poza de Chinchirigoi |
Terminamos comiendo en Sieste deleitándonos la boca con una sabrosa tortilla de patata cristobalera que hace que nuestra ensaladilla se quede en la fiambrera...Hummm qué rica!! Nos estáis malacostrumbrando...no veis que nos lo zampamos todo!!