...De Belorado a San Juan de Ortega...
El segundo día de camino fue peor que el anterior. Ya salimos lloviendo de Belorado y fue empeorando a lo largo de la mañana, agua, frio y un aire que nos doblaba las varillas de los paraguas. Suerte que encontramos un sitio a cubierto para comer y que somos muy animosos porque llegamos a San Juan de Ortega mojados y llenos de barro. La ducha y la estupenda cena que nos sirvieron (con morcilla y todo) nos reanimó y aun echamos unas partidas y unos pacharanes en el comedor del hotel. Al día siguiente estábamos nuevos y deseando llegar a Burgos.
Entre el agua y el viento no podíamos dar un paso, rompimos todos los paraguas y llegamos empapados.
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