BARRANCO DE CABALLERA

Domingo, 1 de marzo de 2015.

Muchas veces hemos subido a Caballera por la senda que transcurre paralela a este barranco y, viendo los diversos saltos de altura que desde ella se divisan, siempre decíamos que teníamos que entrar en ese agujero. Hoy por fin se ha hecho realidad esta cabezonada monzonera y parte del grupo entrará en él.

A la izquierda, mi nueva adquisición, a la derecha, la que
abandono temporalmente...

Previo suculento almuerzo en Besians, nos ponemos en marcha. Pasado el puente del río Esera, donde aparcamos, parte una pista a la derecha dirección Caballera que seguimos hasta el siguiente cruce donde continuaremos de nuevo a la derecha también por pista hasta que ésta cruce el barranco.  De aquí parte una senda a la izquierda que va paralela al barranco en ascenso. La seguimos sobre 50 minutos. En una curva cerrada a la derecha nosotros seguimos recto aunque veamos unas piedras dispuestas para no salirse de la senda principal. Desde aquí hay que ir paralelos al barranco buscando el mejor paso y a la altura de una borda a la derecha bajamos a la izquierda en busca de la cabecera del barranco. Viene a costar una hora y cuarto con la calma.

En la citada curva tenemos la grata sorpresa de Ramón y las hermanas Sahún, que han venido a esperarnos para acompañarnos hasta la cabecera. Mientras Javier, Cris, Esther, Javi, Miguel, Ramón y J.C descienden el primer rápel Carmen, Ramón, las Sahún y la menda los miramos entusiasmados (y la menda entristecida por no poder entar con ellos...) y seguimos su curso por la parte alta hasta perderlos de vista chapoteando por las pozas, donde alguno, hasta se tira de cabeza.

El barranco consta de cinco rápeles, un caos de grandes bloques y varios destrepes, algunos de los cuales bajamos con cuerda. La longitud de los rápeles son más o menos: 15 m, 40 m (unos 30 m volados), 10 m, y dos de 8 m y sus instalaciones, excepto la primera con dos parabolts, están en medios naturales. La roca es arenisca y caliza, con grandes pozas verde esmeralda que no cubren en exceso, pero aún nos dieron para dos saltos. Recomendamos entrar en él después de fuertes lluvias. Considerándolo un descenso de coleccionistas, lo cierto es que el lugar no desmerece...destacando su gran caos y su largo rápel volado. Nos llevará bajarlo entre dos horas y media o tres. 

Saldremos del cauce cuando encontremos unas cañas. Existe una senda a la izquierda que, por medio de una chopera, nos deja en la pista por la que hemos comenzado a andar esta mañana. En cinco minutos en el coche.

Rápel volado de 40 metros

 Hoy la recompensa no va a ser terminar en el bar, sino en "Casa Ambrosio" de Caballera, donde el resto del grupo nos recibe con un buen vermú al que le sigue una paella de marisco "estilo loliano" que está para chuparse los dedos y para repetir una vez tras otra, que ya se sabe que esta banda tiene buen saque...

Y así termina un día redondo de los que será difícil olvidarse.

Si queréis el track, aquí.

Y si queréis ver el barranco en vivo y en directo aquí
os dejo el vídeo que ha montado Javi Jr. para que disfrutemos de él.