Aunque el día amaneció con una ligera lluvia, luego nos sorprendió un caluroso sol que nos permitió disfrutar mucho de la jornada.
No tenemos fotos del almuerzo, pero fue la primera faena que hicimos al llegar.
Se acercaba la hora de comer y para hacer hambre nos fuimos de paseo hasta el mirador de las antenas, que muchos sólo lo conocíamos de noche, y de día todavía nos gustó más.
A nuestros pies quedaba Santaliestra, en frente el pueblo de Aguilar y el Esera recorriendo todo el valle.
Aunque no conseguimos abrir mucho el apetito, el vermouth es imperdonable en este tipo de reuniones. Así que a comer otra vez...
Como siempre la comida fue estupenda, aunque aparecieron dos empanadones de más que hicieron que nos sobrara postre, o eso, o que Pepe no vino a este evento para terminárselo.
1 comentario:
...y Pepe que no vino?
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