El 12 de agosto, después de la terrible ola de calor, fuimos a comprobar si las frías aguas de este barranco se habían calentado algo, pero seguían muy muy frías.
Para la aproximación engañamos a Berta, Yoyi y las perras y nos acompañaron andando, pero al agujero no quisieron entrar. Así que entramos sólo tres: Pepe, JC y la menda.
Salimos del parking de la Sarra, encima de Sallent de Gállego, cogiendo la senda que sube a Respomuso, y a altura del Llano del Cheto, cuando tenemos el cauce a la altura, entramos.
Tenemos por delante dos horas y media con 5 rápeles, el más largo de 19 m y el más corto de 6 m, además de numerosos resaltes equipados para rapelar, aunque nosotros los destrepamos todos, puesto que el caudal no era excesivo.
Lo peor de este descenso es la maraña de troncos que en numerosas ocasiones hay que destrepar y resbalan muchísmo, además de sentirse mono de feria cuando los senderistas que van por encima no paran de echarte fotos.
2 comentarios:
pero bueno... todos estos barrancos y nosotros que? vais a tener que repetir un montón.
Repetir???
Hay que seguir explorando!!!
Vamos a solicitar de nuevo la Biblia y os váis a enterar!!!
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